Descripción: La ética de datos conductuales se centra en el uso ético de los datos recopilados de los comportamientos de los usuarios. Este enfoque busca garantizar que la recolección, análisis y aplicación de datos sobre las acciones y preferencias de los individuos se realice de manera responsable y respetuosa. La ética de datos conductuales implica considerar la privacidad de los usuarios, el consentimiento informado y la transparencia en el manejo de la información. A medida que las tecnologías avanzan y se vuelven más intrusivas, la necesidad de establecer principios éticos claros se vuelve crucial. Esto incluye la obligación de las empresas y organizaciones de informar a los usuarios sobre cómo se utilizan sus datos, así como la responsabilidad de evitar prácticas que puedan llevar a la manipulación o explotación de los mismos. La ética de datos conductuales también abarca la equidad en el uso de algoritmos y modelos predictivos, asegurando que no se perpetúen sesgos ni se discrimine a ciertos grupos. En un mundo donde los datos son considerados el nuevo petróleo, la ética en su manejo se convierte en un pilar fundamental para construir confianza entre las empresas y los consumidores, promoviendo un entorno digital más justo y seguro.