Descripción: La evaluación de tecnología en salud se refiere a la evaluación sistemática de las propiedades, efectos e impactos de las tecnologías utilizadas en el ámbito de la salud. Este proceso implica un análisis exhaustivo que considera no solo la eficacia y seguridad de las tecnologías, sino también su costo-efectividad, impacto en la calidad de vida de los pacientes y su integración en los sistemas de salud existentes. La evaluación se basa en evidencia científica y busca proporcionar información objetiva que ayude a los responsables de la toma de decisiones en el sector salud. Las características principales de esta evaluación incluyen la consideración de múltiples perspectivas, como la de los pacientes, los proveedores de salud y los pagadores, así como la necesidad de adaptarse a un entorno en constante cambio, donde las innovaciones tecnológicas emergen rápidamente. La relevancia de la evaluación de tecnología en salud radica en su capacidad para guiar la adopción de nuevas tecnologías, asegurando que estas sean beneficiosas y sostenibles a largo plazo. En un contexto donde los recursos son limitados, esta evaluación se convierte en una herramienta crucial para optimizar la atención médica y mejorar los resultados de salud en la población.
Historia: La evaluación de tecnología en salud comenzó a tomar forma en la década de 1970, cuando se reconoció la necesidad de evaluar de manera sistemática las nuevas tecnologías médicas. Uno de los hitos importantes fue la creación de la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (AETS) en Estados Unidos en 1972, que sentó las bases para la evaluación formal de tecnologías en salud. A lo largo de los años, este campo ha evolucionado, incorporando metodologías más sofisticadas y un enfoque más amplio que incluye aspectos económicos y sociales.
Usos: La evaluación de tecnología en salud se utiliza principalmente para informar decisiones sobre la adopción de nuevas tecnologías médicas, guiar políticas de salud y asignar recursos de manera eficiente. También se aplica en la investigación para identificar brechas en la evidencia y en la formación de profesionales de la salud sobre el uso adecuado de tecnologías.
Ejemplos: Un ejemplo de evaluación de tecnología en salud es el análisis de la efectividad de los dispositivos de monitoreo continuo de glucosa en pacientes con diabetes, que ha demostrado mejorar el control glucémico y reducir complicaciones. Otro caso es la evaluación de la telemedicina, que ha sido fundamental durante la pandemia de COVID-19 para garantizar el acceso a la atención médica.
