Descripción: La ‘evidencia física’ en el contexto forense digital se refiere a objetos materiales que pueden ser analizados durante una investigación. Esta evidencia puede incluir dispositivos electrónicos, como computadoras, teléfonos móviles, discos duros y otros medios de almacenamiento que contienen datos relevantes para un caso. La importancia de la evidencia física radica en su capacidad para proporcionar información tangible que puede ser examinada y utilizada para establecer hechos en un proceso judicial. A diferencia de la evidencia testimonial, que depende de la memoria y la percepción de los testigos, la evidencia física ofrece un registro objetivo que puede ser verificado y analizado científicamente. La recolección y preservación adecuada de esta evidencia son cruciales, ya que cualquier alteración o daño puede comprometer su integridad y, por ende, su validez en un tribunal. La evidencia física puede ser analizada mediante diversas técnicas forenses, como la recuperación de datos, el análisis de archivos y la investigación de redes, lo que permite a los investigadores reconstruir eventos y establecer conexiones entre los sospechosos y los delitos. En resumen, la evidencia física es un componente esencial en las investigaciones forenses digitales, proporcionando una base sólida para la resolución de casos y la administración de justicia.