Descripción: La explotación pública se refiere a un conjunto de herramientas, técnicas y recursos que están disponibles para cualquier persona con el fin de realizar pruebas de penetración en sistemas informáticos. Estas herramientas son accesibles a través de internet y pueden ser utilizadas por profesionales de la seguridad, investigadores o incluso por individuos con intenciones maliciosas. La principal característica de la explotación pública es que no requiere permisos especiales ni conocimientos avanzados para acceder a ellas, lo que las convierte en un recurso valioso tanto para la evaluación de la seguridad como para la identificación de vulnerabilidades en sistemas. Este tipo de explotación se basa en la premisa de que, al ser de acceso público, cualquier persona puede intentar atacar un sistema, lo que resalta la importancia de la ciberseguridad y la necesidad de proteger adecuadamente los sistemas informáticos. La explotación pública puede incluir desde scripts simples hasta herramientas complejas que permiten realizar ataques sofisticados, y su uso puede tener implicaciones significativas en la seguridad de la información y la integridad de los datos. En un mundo cada vez más digitalizado, la explotación pública se ha convertido en un tema relevante en el ámbito de la ciberseguridad, ya que permite a los profesionales evaluar la resistencia de sus sistemas ante posibles ataques.