Descripción: El filtrado de dominio es un método utilizado para bloquear o permitir el tráfico de red basado en nombres de dominio. Este enfoque se integra comúnmente en los firewalls y sistemas de seguridad de red, permitiendo a los administradores gestionar el acceso a recursos en línea de manera más efectiva. A diferencia del filtrado de IP, que se basa en direcciones numéricas, el filtrado de dominio utiliza nombres legibles por humanos, lo que facilita la identificación de sitios web y servicios. Este método permite a las organizaciones establecer políticas de seguridad más precisas, ya que pueden bloquear o permitir el acceso a dominios específicos, protegiendo así a los usuarios de contenido no deseado o potencialmente dañino. Además, el filtrado de dominio puede ayudar a prevenir ataques cibernéticos al restringir el acceso a sitios conocidos por distribuir malware o realizar actividades maliciosas. En un entorno tecnológico, esta técnica es esencial para mantener la productividad y la seguridad, ya que permite a los administradores controlar el acceso a recursos en línea de manera granular, asegurando que los usuarios solo accedan a contenido relevante y seguro.
