Descripción: El flujo de trabajo de incidentes se refiere a la secuencia de procesos involucrados en la gestión de un incidente de seguridad. Este proceso es fundamental para garantizar una respuesta rápida y efectiva ante cualquier amenaza o vulnerabilidad que pueda comprometer la integridad de un sistema o red. Un flujo de trabajo bien definido permite a los equipos de seguridad identificar, clasificar, investigar y resolver incidentes de manera sistemática. Incluye etapas como la detección, análisis, contención, erradicación y recuperación, así como la documentación y el aprendizaje posterior. La orquestación de seguridad juega un papel crucial en este flujo, integrando diversas herramientas y tecnologías para automatizar tareas y mejorar la eficiencia. En un Centro de Operaciones de Seguridad (SOC), el flujo de trabajo de incidentes es vital para coordinar la respuesta a incidentes y asegurar que se sigan las mejores prácticas. La gestión de información y eventos de seguridad (SIEM) también se integra en este flujo, proporcionando datos críticos para la toma de decisiones. En el contexto de la seguridad informática, el flujo de trabajo de incidentes se adapta para abordar las particularidades de distintos entornos, asegurando que las aplicaciones y servicios sean seguros desde su desarrollo hasta su implementación. La automatización y respuesta son esenciales para reducir el tiempo de respuesta y minimizar el impacto de los incidentes, mientras que el logging y la observabilidad permiten un seguimiento continuo y una mejora constante del proceso.