Descripción: La gestión de impacto es el proceso de evaluar y gestionar el impacto de proyectos e iniciativas, con el objetivo de maximizar los beneficios y minimizar los efectos negativos en la sociedad, el medio ambiente y la economía. Este enfoque implica la identificación de los efectos potenciales de una acción antes de su implementación, así como el seguimiento y la evaluación de sus resultados. La gestión de impacto se basa en la premisa de que cada proyecto o iniciativa tiene repercusiones que pueden ser tanto positivas como negativas, y que es fundamental comprender estas dinámicas para tomar decisiones informadas. Las características principales de la gestión de impacto incluyen la planificación estratégica, la participación de las partes interesadas, la recopilación de datos y la evaluación continua. Este proceso no solo se aplica a proyectos de desarrollo social o ambiental, sino que también es relevante en el ámbito empresarial, donde las organizaciones buscan entender cómo sus operaciones afectan a la comunidad y al entorno. En un mundo cada vez más interconectado, la gestión de impacto se ha convertido en una herramienta esencial para garantizar que las iniciativas sean sostenibles y responsables, promoviendo un desarrollo equilibrado y ético.