Descripción: Un grafo acíclico es una estructura de datos que se caracteriza por no contener ciclos, lo que significa que no es posible regresar al mismo vértice siguiendo las aristas del grafo. En términos más técnicos, un grafo acíclico es un conjunto de nodos (o vértices) conectados por aristas (o enlaces) donde cada camino entre dos nodos es único y no se repite. Esta propiedad de aciclicidad es fundamental en diversas aplicaciones, ya que permite representar relaciones jerárquicas y secuenciales de manera clara y eficiente. Los grafos acíclicos son especialmente relevantes en el contexto de los grafos dirigidos, donde las aristas tienen una dirección específica, lo que refuerza la imposibilidad de formar ciclos. Esta característica los hace ideales para modelar estructuras como árboles, donde cada nodo tiene un único padre y puede tener múltiples hijos, pero no hay forma de volver al nodo padre a través de sus hijos. En resumen, los grafos acíclicos son herramientas poderosas en la representación de datos y relaciones, proporcionando una base sólida para el análisis y la manipulación de información en diversas disciplinas.