Descripción: La IA feminista se centra en abordar los sesgos de género y promover la equidad de género en el desarrollo y la aplicación de tecnologías de inteligencia artificial. Este enfoque busca garantizar que las herramientas de inteligencia artificial no perpetúen ni amplifiquen las desigualdades existentes, sino que, por el contrario, contribuyan a la justicia social y a la inclusión. La IA feminista se basa en la premisa de que la tecnología debe ser diseñada y utilizada de manera que refleje y respete la diversidad de experiencias y perspectivas de todas las personas, especialmente aquellas que han sido históricamente marginadas. Esto implica no solo la identificación y mitigación de sesgos en los algoritmos, sino también la inclusión de voces diversas en el proceso de desarrollo. La ética de la IA feminista aboga por la transparencia, la rendición de cuentas y la participación activa de las comunidades afectadas en la creación de sistemas de inteligencia artificial. Al hacerlo, se busca no solo mejorar la calidad de los datos y los modelos, sino también fomentar un entorno tecnológico que promueva la equidad y el respeto por los derechos humanos. En un mundo donde la inteligencia artificial está cada vez más presente en decisiones críticas, desde la contratación hasta la justicia penal, la IA feminista se convierte en una herramienta esencial para garantizar que estas tecnologías sirvan a todos de manera justa y equitativa.