Descripción: La IA no ética se refiere a sistemas de inteligencia artificial que operan sin adherirse a principios éticos, lo que puede resultar en decisiones perjudiciales o sesgadas. Estos sistemas pueden perpetuar o incluso amplificar desigualdades sociales, raciales o de género, ya que a menudo se entrenan con datos que contienen sesgos inherentes. La falta de transparencia en los algoritmos y la ausencia de responsabilidad en su implementación son características comunes de la IA no ética. Esto plantea serias preocupaciones sobre la justicia, la privacidad y la seguridad, ya que las decisiones automatizadas pueden afectar la vida de las personas de manera significativa. La IA no ética puede manifestarse en diversas aplicaciones, desde sistemas de reconocimiento facial que discriminan a ciertos grupos hasta algoritmos de toma de decisiones en contextos como contratación, crédito y justicia penal que favorecen a ciertos perfiles en detrimento de otros. La creciente dependencia de la IA en sectores críticos como la salud, la justicia y la seguridad pública resalta la necesidad urgente de establecer marcos éticos que guíen el desarrollo y la implementación de estas tecnologías. Sin una regulación adecuada, la IA no ética puede convertirse en una herramienta de opresión en lugar de un recurso para el progreso social.