Descripción: La ‘Información Resguardada’ se refiere a aquellos datos que están protegidos contra el acceso o divulgación no autorizados. Esta protección es fundamental en un mundo donde la digitalización y la interconexión de sistemas han aumentado exponencialmente el riesgo de violaciones de datos. La información resguardada puede incluir datos personales, financieros, médicos y cualquier otro tipo de información sensible que, si se expone, podría causar daño a individuos o a organizaciones. Las características principales de esta información incluyen su confidencialidad, integridad y disponibilidad, que son pilares en la gestión de la seguridad de la información. La confidencialidad asegura que solo las personas autorizadas tengan acceso a los datos, la integridad garantiza que la información no sea alterada sin autorización, y la disponibilidad asegura que los datos estén accesibles cuando se necesiten. La relevancia de la información resguardada ha crecido con la implementación de regulaciones como el GDPR en Europa y la Ley de Privacidad del Consumidor de California (CCPA), que exigen a las organizaciones proteger los datos de sus usuarios y ser transparentes sobre su uso. En resumen, la información resguardada es un componente esencial en la protección de datos y la privacidad, y su correcta gestión es crucial para mantener la confianza de los usuarios y la reputación de las organizaciones.