Descripción: Infraestructura como Servicio (IaaS) es un modelo de servicio de computación en la nube que proporciona recursos de computación virtualizados a través de Internet. Este enfoque permite a las organizaciones acceder a recursos de hardware, como servidores, almacenamiento y redes, sin necesidad de adquirir y mantener la infraestructura física. IaaS ofrece flexibilidad y escalabilidad, permitiendo a las empresas ajustar sus recursos según la demanda. Los usuarios pueden aprovisionar y gestionar estos recursos a través de interfaces de programación de aplicaciones (API) o paneles de control, facilitando la implementación de aplicaciones y servicios. Entre sus características principales se encuentran la virtualización, la automatización y la capacidad de pago por uso, lo que optimiza costos y mejora la eficiencia operativa. IaaS es fundamental para el desarrollo de soluciones en la nube, ya que permite a las empresas centrarse en su negocio principal sin preocuparse por la gestión de la infraestructura subyacente.
Historia: El concepto de Infraestructura como Servicio (IaaS) comenzó a tomar forma a mediados de la década de 2000, cuando empresas como Amazon lanzaron sus servicios de computación en la nube. En 2006, Amazon Web Services (AWS) presentó Amazon EC2, que permitió a los usuarios alquilar servidores virtuales, marcando un hito en la adopción de IaaS. Desde entonces, otros proveedores como Microsoft Azure, Google Cloud y Alibaba Cloud han desarrollado sus propias ofertas de IaaS, ampliando el mercado y mejorando la competencia.
Usos: IaaS se utiliza principalmente para el alojamiento de aplicaciones, la recuperación ante desastres, el desarrollo y pruebas de software, y la creación de entornos de trabajo virtuales. Las empresas pueden escalar sus recursos de manera rápida y eficiente, lo que es especialmente útil durante picos de demanda. Además, IaaS permite a las organizaciones experimentar con nuevas tecnologías sin comprometer grandes inversiones en hardware.
Ejemplos: Ejemplos de IaaS incluyen Amazon EC2, que permite a los usuarios lanzar instancias de servidores virtuales; Microsoft Azure, que ofrece una amplia gama de servicios de infraestructura; y Google Compute Engine, que proporciona recursos de computación escalables. Otros ejemplos son Oracle Cloud, Alibaba Cloud y OpenNebula, que también ofrecen soluciones de IaaS para diferentes necesidades empresariales.
