Descripción: La iniciación es la fase inicial del proceso de combustión de un fuego artificial. En esta etapa, se produce la ignición de los componentes químicos que componen el artefacto, lo que da inicio a la reacción que generará luz, sonido y efectos visuales. La iniciación es crucial, ya que determina el éxito del espectáculo pirotécnico. Durante esta fase, se utilizan elementos como mechas, pólvora y otros compuestos que, al ser encendidos, inician la cadena de reacciones químicas necesarias para la explosión controlada. La calidad y el diseño de la iniciación son fundamentales para asegurar que el fuego artificial se encienda de manera segura y efectiva, evitando fallos que podrían resultar en accidentes. Además, la iniciación debe ser precisa, ya que un encendido demasiado temprano o tardío puede afectar la secuencia de los efectos visuales y sonoros esperados. En resumen, la iniciación es un componente esencial en la pirotecnia, que no solo garantiza la seguridad del espectáculo, sino que también contribuye a la experiencia estética del mismo.