Descripción: La innovación disruptiva se refiere a un proceso mediante el cual una nueva tecnología o modelo de negocio altera significativamente la forma en que operan las industrias establecidas. Este tipo de innovación suele comenzar en segmentos de mercado más pequeños o menos rentables, donde las empresas tradicionales no ven un valor inmediato. Con el tiempo, estas innovaciones pueden mejorar y escalar, desafiando a las empresas consolidadas y cambiando las reglas del juego. Las características principales de la innovación disruptiva incluyen su capacidad para ofrecer soluciones más accesibles, eficientes y sostenibles, lo que a menudo resulta en la creación de nuevos mercados y la transformación de los existentes. En el contexto de la sostenibilidad, la innovación disruptiva puede jugar un papel crucial al introducir tecnologías que reducen el impacto ambiental, optimizan el uso de recursos y promueven prácticas más responsables. Este enfoque no solo beneficia a las empresas al abrir nuevas oportunidades de negocio, sino que también contribuye a un futuro más sostenible para la sociedad en su conjunto.
Historia: El término ‘innovación disruptiva’ fue popularizado por Clayton Christensen en su libro ‘The Innovator’s Dilemma’, publicado en 1997. Christensen describió cómo las empresas líderes a menudo fallan al ignorar tecnologías emergentes que inicialmente parecen inferiores. A lo largo de los años, el concepto ha evolucionado y se ha aplicado a diversas industrias, desde la tecnología hasta la atención médica, destacando la importancia de adaptarse a los cambios del mercado.
Usos: La innovación disruptiva se utiliza en múltiples sectores, incluyendo tecnología, energía, transporte y salud. En tecnología, por ejemplo, se manifiesta a través de software y plataformas que transforman la forma en que interactuamos y consumimos información. En energía, tecnologías como la solar y eólica están desafiando las fuentes de energía tradicionales. En el transporte, la llegada de vehículos eléctricos y servicios de movilidad compartida está revolucionando la industria automotriz.
Ejemplos: Ejemplos de innovación disruptiva incluyen la llegada de Netflix, que transformó la industria del entretenimiento al ofrecer streaming en lugar de alquiler de DVD, y la adopción de teléfonos inteligentes, que cambiaron la forma en que las personas se comunican y acceden a la información. En el ámbito de la sostenibilidad, empresas como Tesla han revolucionado el mercado automotriz con vehículos eléctricos, desafiando a los fabricantes de automóviles tradicionales.
