Descripción: La institucionalización es el proceso mediante el cual una práctica, idea o modelo se incorpora de manera formal y duradera dentro de una organización o cultura. Este proceso implica la creación de estructuras, normas y procedimientos que permiten que la nueva práctica se convierta en parte integral del funcionamiento cotidiano de la entidad. La institucionalización no solo se refiere a la adopción de nuevas tecnologías o métodos, sino también a la aceptación y legitimación de estos dentro del contexto social y organizativo. A menudo, este proceso es impulsado por la necesidad de adaptarse a cambios en el entorno, mejorar la eficiencia o responder a demandas externas. Las características principales de la institucionalización incluyen la formalización de procesos, la creación de políticas y la asignación de recursos para asegurar la sostenibilidad de la práctica adoptada. La relevancia de la institucionalización radica en su capacidad para transformar innovaciones en prácticas estables y reconocidas, lo que a su vez puede influir en la cultura organizacional y en la forma en que se llevan a cabo las actividades. En resumen, la institucionalización es un fenómeno clave en la difusión de modelos, ya que permite que las innovaciones se integren de manera efectiva en el tejido de las organizaciones y sociedades.