Descripción: La integridad de archivos se refiere al estado de un archivo que no ha cambiado y no está dañado. Este concepto es fundamental en el ámbito de la informática y la gestión de datos, ya que asegura que la información almacenada se mantenga intacta y sin alteraciones. La integridad de archivos se puede evaluar mediante diversas técnicas, como el uso de sumas de verificación (checksums) y algoritmos de hash, que permiten verificar que el contenido de un archivo coincide con su versión original. La pérdida de integridad puede ocurrir debido a errores de hardware, ataques maliciosos, corrupción de datos o fallos en el software. Por lo tanto, mantener la integridad de los archivos es crucial para la seguridad de la información, la recuperación ante desastres y la gestión de versiones. En entornos de virtualización y servicios en la nube, la integridad de archivos se convierte en un aspecto esencial para garantizar que los datos de los usuarios permanezcan seguros y accesibles. Además, en el contexto de la optimización del rendimiento en sistemas y aplicaciones, la integridad de archivos asegura que los recursos y aplicaciones funcionen correctamente, mejorando la experiencia del usuario y la estabilidad del sistema.