Descripción: La integridad operacional se refiere a la garantía de que los procesos operacionales de una organización están funcionando correctamente y de manera eficiente. Este concepto abarca la supervisión continua de las actividades y sistemas que componen la infraestructura operativa de una empresa, asegurando que se cumplan los estándares de calidad y seguridad. La integridad operacional implica la implementación de sistemas de monitorización que permiten detectar desviaciones, fallos o ineficiencias en tiempo real. Esto no solo ayuda a prevenir problemas antes de que se conviertan en crisis, sino que también optimiza el rendimiento general de las operaciones. La integridad operacional se basa en la recopilación y análisis de datos, lo que permite a las organizaciones tomar decisiones informadas y basadas en evidencia. Además, fomenta una cultura de mejora continua, donde se busca constantemente la optimización de procesos y la reducción de riesgos. En un entorno empresarial cada vez más complejo y competitivo, mantener la integridad operacional se ha vuelto esencial para garantizar la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de las organizaciones.
