Descripción: Una interfaz virtual es un componente de software que facilita la comunicación entre máquinas virtuales y la red física. Esta interfaz actúa como un puente, permitiendo que las máquinas virtuales, que operan en un entorno aislado, interactúen con el hardware físico y otros recursos de red. Las interfaces virtuales son esenciales en la virtualización, ya que permiten a múltiples sistemas operativos y aplicaciones coexistir en un solo servidor físico, optimizando el uso de recursos y mejorando la eficiencia. Estas interfaces pueden simular adaptadores de red, dispositivos de almacenamiento y otros componentes, proporcionando a las máquinas virtuales la capacidad de enviar y recibir datos como si estuvieran conectadas directamente a la red física. Además, las interfaces virtuales pueden ser configuradas para ofrecer características avanzadas como balanceo de carga, seguridad y segmentación de red, lo que las convierte en una herramienta poderosa en la administración de infraestructuras de TI modernas. En resumen, la interfaz virtual es un elemento clave en la arquitectura de virtualización, permitiendo la flexibilidad y escalabilidad necesarias en entornos de computación contemporáneos.