Descripción: La logística de última milla se refiere a la etapa final del proceso logístico, enfocándose en la entrega de bienes al cliente final. Este componente es crucial en la cadena de suministro, ya que representa el último paso en el recorrido de un producto desde el almacén hasta el consumidor. La logística de última milla no solo implica el transporte físico de los productos, sino también la gestión de la experiencia del cliente, la optimización de rutas y la reducción de costos. En un mundo cada vez más digitalizado, donde las expectativas de los consumidores son altas, la eficiencia en esta etapa se ha vuelto fundamental. Las empresas deben adaptarse a las demandas de entregas rápidas y precisas, lo que ha llevado a la implementación de tecnologías avanzadas, como el uso de aplicaciones móviles, sistemas de seguimiento en tiempo real y vehículos autónomos. Además, la sostenibilidad se ha convertido en un aspecto importante, impulsando a las empresas a buscar métodos de entrega más ecológicos. En resumen, la logística de última milla es un elemento esencial que conecta a las empresas con sus clientes, garantizando que los productos lleguen de manera eficiente y satisfactoria.
Historia: La logística de última milla ha evolucionado significativamente desde sus inicios. Aunque el concepto de logística se remonta a tiempos antiguos, la logística de última milla como la conocemos hoy comenzó a tomar forma en la década de 1980 con el auge del comercio electrónico. La popularización de las compras en línea en la década de 1990, impulsada por empresas como Amazon, llevó a un enfoque renovado en la eficiencia de las entregas. A medida que la tecnología avanzaba, se introdujeron soluciones como el seguimiento de paquetes y la optimización de rutas, lo que mejoró la experiencia del cliente. En la última década, la logística de última milla ha sido transformada por la digitalización y la automatización, con el uso de drones y vehículos autónomos como una tendencia emergente.
Usos: La logística de última milla se utiliza principalmente en el comercio electrónico, donde la entrega rápida y eficiente es crucial para la satisfacción del cliente. También se aplica en la distribución de alimentos y productos perecederos, donde la frescura es esencial. Además, se utiliza en la entrega de productos farmacéuticos, donde la puntualidad y la precisión son vitales. Las empresas de mensajería y paquetería también dependen de la logística de última milla para garantizar que los paquetes lleguen a los destinatarios de manera oportuna.
Ejemplos: Un ejemplo de logística de última milla es el servicio de entrega de Amazon Prime, que ofrece entregas en el mismo día o al día siguiente en muchas áreas. Otro caso es el uso de bicicletas de mensajería en ciudades densamente pobladas, donde el tráfico puede dificultar las entregas rápidas. Además, algunas empresas están experimentando con drones para realizar entregas en áreas rurales o de difícil acceso, como lo ha hecho Wing, una empresa de Alphabet.
