Descripción: M-Health, o salud móvil, es un término que se refiere al uso de dispositivos móviles en la atención médica. Este concepto abarca una amplia gama de aplicaciones y servicios que utilizan tecnologías móviles, como teléfonos inteligentes y tabletas, para mejorar la salud y el bienestar de las personas. M-Health permite a los profesionales de la salud y a los pacientes interactuar de manera más eficiente, facilitando el acceso a información médica, el monitoreo de condiciones de salud y la gestión de tratamientos. Las características principales de M-Health incluyen la capacidad de recopilar datos en tiempo real, la comunicación instantánea entre pacientes y médicos, y el acceso a recursos de salud desde cualquier lugar. La relevancia de M-Health radica en su potencial para transformar la atención médica, especialmente en áreas rurales o desatendidas, donde el acceso a servicios de salud puede ser limitado. Además, M-Health promueve la prevención y el autocuidado, empoderando a los pacientes para que tomen un papel activo en su salud.
Historia: El concepto de M-Health comenzó a ganar atención a principios de la década de 2000, cuando los teléfonos móviles comenzaron a ser más accesibles y potentes. En 2005, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un informe que destacaba el potencial de las tecnologías móviles para mejorar la salud pública. Desde entonces, el campo ha evolucionado rápidamente, impulsado por el aumento de la conectividad a Internet y el desarrollo de aplicaciones móviles específicas para la salud. En 2010, se celebró la primera Conferencia Mundial sobre M-Health, lo que marcó un hito en la formalización de este campo.
Usos: M-Health se utiliza en diversas aplicaciones, incluyendo el monitoreo de enfermedades crónicas, la gestión de medicamentos, la promoción de hábitos saludables y la educación en salud. También se emplea para la telemedicina, permitiendo consultas a distancia entre pacientes y médicos, así como para la recopilación de datos de salud pública a través de encuestas y aplicaciones de seguimiento.
Ejemplos: Ejemplos concretos de M-Health incluyen aplicaciones que ayudan a los usuarios a rastrear su dieta y ejercicio, plataformas de telemedicina que permiten a los pacientes consultar a médicos a través de videollamadas, y el uso de dispositivos portátiles que monitorean la actividad física y la salud del corazón.
