Descripción: La memoria nativa se refiere a la memoria que es asignada y gestionada directamente por el sistema operativo, en contraposición a la memoria gestionada por una máquina virtual. Este tipo de memoria es crucial para el rendimiento de las aplicaciones, ya que permite un acceso más rápido y eficiente a los recursos del sistema. La memoria nativa se utiliza principalmente en entornos donde se requiere un control preciso sobre la gestión de recursos, como en sistemas operativos y aplicaciones de alto rendimiento. A diferencia de la memoria gestionada por máquinas virtuales, que puede introducir una capa adicional de abstracción y, por ende, latencia, la memoria nativa permite a los desarrolladores optimizar el uso de la memoria y mejorar la velocidad de ejecución de sus programas. Además, la gestión de memoria nativa implica la asignación y liberación de bloques de memoria, lo que requiere un manejo cuidadoso para evitar problemas como fugas de memoria o corrupción de datos. En resumen, la memoria nativa es un componente esencial en la arquitectura de sistemas y aplicaciones que demandan un alto rendimiento y eficiencia en el uso de recursos.