Descripción: La Métrica de Redundancia es una medida crucial en el ámbito de la Calidad de Servicio (QoS) que evalúa la efectividad de los sistemas de respaldo implementados para garantizar la continuidad del servicio en caso de fallos o interrupciones. Esta métrica se centra en la capacidad de un sistema para mantener su operatividad a pesar de la presencia de fallos en componentes individuales. La redundancia puede manifestarse de diversas formas, como la duplicación de hardware, la implementación de rutas alternativas en redes o la utilización de copias de seguridad de datos. La importancia de la Métrica de Redundancia radica en su papel en la minimización del tiempo de inactividad y en la mejora de la fiabilidad del servicio. Un sistema con alta redundancia es capaz de recuperarse rápidamente de fallos, lo que se traduce en una experiencia de usuario más fluida y en la preservación de la integridad de los datos. Además, esta métrica es fundamental para la planificación y diseño de infraestructuras tecnológicas, ya que permite a las organizaciones evaluar el nivel de riesgo asociado a la pérdida de servicio y tomar decisiones informadas sobre inversiones en tecnología y recursos. En un mundo cada vez más dependiente de la tecnología, la Métrica de Redundancia se ha convertido en un estándar esencial para asegurar que los servicios críticos permanezcan disponibles y operativos en todo momento.