Descripción: Las métricas de escalado son mediciones utilizadas para determinar cuándo es necesario aumentar o disminuir los recursos en un entorno de computación en la nube. Estas métricas son fundamentales para el autoescalado, un proceso que permite a las aplicaciones adaptarse dinámicamente a las variaciones en la demanda de recursos. Las métricas pueden incluir el uso de CPU, la memoria, el tráfico de red, las solicitudes por segundo y otros indicadores de rendimiento. Al monitorear estas métricas, los sistemas pueden tomar decisiones informadas sobre cuándo agregar instancias adicionales o reducir el número de instancias en funcionamiento, optimizando así el uso de recursos y los costos operativos. La capacidad de escalar automáticamente en función de estas métricas permite a las empresas mantener un rendimiento óptimo de sus aplicaciones, incluso durante picos de tráfico inesperados. Además, el uso eficiente de recursos contribuye a la sostenibilidad y a la reducción de la huella de carbono, ya que se evita el uso excesivo de energía y recursos computacionales. En resumen, las métricas de escalado son esenciales para garantizar que las aplicaciones en la nube funcionen de manera eficiente y rentable, adaptándose a las necesidades cambiantes del negocio y del mercado.
