Descripción: Los modelos de detección de valores atípicos son técnicas avanzadas que identifican puntos de datos que se desvían significativamente del resto en un conjunto de datos. Estos modelos son especialmente útiles en situaciones donde los datos presentan múltiples distribuciones o agrupaciones, lo que puede dificultar la identificación de anomalías utilizando métodos unidimensionales. La capacidad de estos modelos para manejar datos complejos y heterogéneos los convierte en herramientas valiosas en diversas disciplinas, desde la estadística hasta el aprendizaje automático. Los modelos de detección de valores atípicos pueden integrar diferentes tipos de datos, como imágenes, texto y datos numéricos, permitiendo una detección más robusta y precisa de las anomalías. Además, su enfoque en la identificación de patrones y la segmentación de datos les permite adaptarse a diferentes contextos y necesidades, lo que los hace altamente relevantes en la actualidad. En resumen, los modelos de detección de valores atípicos son fundamentales para el análisis de datos, ya que ayudan a descubrir información oculta y a mejorar la calidad de los datos al identificar y gestionar anomalías.