Descripción: El monitoreo interno se refiere a la práctica de supervisar de manera continua los procesos y sistemas dentro de una organización con el objetivo de garantizar el cumplimiento de normativas y la eficiencia operativa. Esta actividad implica la recolección y análisis de datos relacionados con el rendimiento de los sistemas, la identificación de posibles fallos o ineficiencias, y la implementación de mejoras. El monitoreo interno es esencial para la gestión de riesgos, ya que permite a las organizaciones detectar problemas antes de que se conviertan en crisis. Además, fomenta la transparencia y la rendición de cuentas, ya que proporciona información valiosa sobre el funcionamiento interno. Las herramientas utilizadas para el monitoreo interno pueden variar desde software especializado hasta auditorías manuales, y su implementación puede abarcar desde la supervisión de sistemas informáticos hasta la evaluación de procesos administrativos. En un entorno empresarial cada vez más complejo y regulado, el monitoreo interno se ha convertido en un componente crítico para asegurar la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de las organizaciones.
