Descripción: La monitorización de JVM implica rastrear el rendimiento y el uso de recursos de la Máquina Virtual de Java. Este proceso es crucial para garantizar que las aplicaciones Java funcionen de manera eficiente y estable. La JVM actúa como un intermediario entre el código Java y el sistema operativo, gestionando la ejecución de programas, la memoria y otros recursos. La monitorización permite a los desarrolladores y administradores de sistemas identificar cuellos de botella, fugas de memoria y otros problemas que pueden afectar el rendimiento de las aplicaciones. Herramientas de monitorización como JVisualVM, JConsole y soluciones de terceros como New Relic o AppDynamics proporcionan métricas en tiempo real sobre el uso de CPU, memoria, hilos y otros parámetros críticos. Además, la monitorización de JVM puede incluir la recopilación de datos de logs y eventos, lo que ayuda a realizar un análisis más profundo del comportamiento de la aplicación. En entornos de producción, la monitorización proactiva es esencial para mantener la disponibilidad y el rendimiento óptimo de las aplicaciones, permitiendo a los equipos de desarrollo responder rápidamente a cualquier anomalía o degradación del servicio.
