Descripción: Un nodo físico en el contexto de sistemas de almacenamiento distribuidos se refiere a un servidor físico que forma parte de un clúster, el cual es un sistema diseñado para proporcionar alta disponibilidad y escalabilidad. Cada nodo físico en un clúster desempeña un papel crucial en la gestión y almacenamiento de datos, ya que alberga componentes esenciales como los demonios de almacenamiento, que son responsables de almacenar los datos en sí, y los demonios de monitoreo, que mantienen la información sobre el estado del clúster. La arquitectura de estos sistemas permite que múltiples nodos físicos trabajen juntos para ofrecer un sistema de almacenamiento resiliente, donde los datos se replican y distribuyen entre diferentes nodos para garantizar la integridad y disponibilidad. Esta estructura permite que el clúster se adapte a fallos de hardware, ya que los datos pueden ser recuperados de otros nodos en caso de que uno falle. Además, los nodos físicos pueden ser escalados horizontalmente, lo que significa que se pueden añadir más servidores al clúster para aumentar la capacidad de almacenamiento y el rendimiento sin interrumpir el servicio. En resumen, los nodos físicos son la base sobre la cual se construye la infraestructura de almacenamiento, permitiendo una gestión eficiente y segura de grandes volúmenes de datos.
