Descripción: La planificación injusta ocurre cuando ciertos procesos se priorizan constantemente sobre otros, lo que lleva a la inanición de recursos. Este fenómeno se presenta en sistemas operativos y entornos de computación donde se gestionan múltiples tareas simultáneamente. En este contexto, algunos procesos pueden recibir una atención desproporcionada, mientras que otros quedan relegados, impidiendo su ejecución o ralentizando su progreso. La planificación injusta se manifiesta en la asignación de tiempo de CPU, donde los procesos de alta prioridad monopolizan los recursos, dejando a los procesos de baja prioridad sin la oportunidad de ser ejecutados. Esto puede resultar en un rendimiento ineficiente del sistema y en la frustración de los usuarios, especialmente en aplicaciones críticas donde la equidad en el acceso a los recursos es esencial. La planificación injusta no solo afecta la eficiencia del sistema, sino que también puede tener implicaciones en la experiencia del usuario, ya que los procesos que requieren atención inmediata pueden verse obstaculizados por la falta de recursos. Por lo tanto, es crucial que los planificadores implementen estrategias que minimicen la posibilidad de planificación injusta, garantizando así un uso más equitativo y eficiente de los recursos del sistema.