Descripción: La Política de Aislamiento se refiere a un conjunto de reglas y directrices que determinan cómo las máquinas virtuales o los entornos de ejecución están aislados entre sí. Este aislamiento es fundamental para garantizar la seguridad y la integridad de los sistemas operativos y las aplicaciones que se ejecutan en ellos. En el contexto de tecnologías de virtualización y contenedores, la Política de Aislamiento permite que diferentes aplicaciones o instancias operen de manera independiente, evitando que un fallo o una vulnerabilidad en una de ellas afecte a las demás. Las características principales de esta política incluyen la restricción de acceso a recursos compartidos, la separación de procesos y la implementación de controles de seguridad que limitan la comunicación entre entornos. Esto no solo protege los datos sensibles, sino que también facilita la gestión de riesgos al contener posibles amenazas dentro de un entorno controlado. La relevancia de la Política de Aislamiento radica en su capacidad para proporcionar un marco seguro en el que las aplicaciones pueden operar, especialmente en entornos multiusuario o en sistemas que manejan información crítica. En resumen, la Política de Aislamiento es un componente esencial en la arquitectura de seguridad de sistemas modernos, permitiendo un funcionamiento seguro y eficiente de múltiples entornos virtuales.
