Descripción: La política de retención es un conjunto de reglas que determina cuánto tiempo se retiene la información en sistemas de gestión de datos. Esta política es crucial para la gestión de datos, ya que establece directrices claras sobre la duración de la conservación de la información, lo que ayuda a las organizaciones a cumplir con normativas legales y a optimizar el uso de recursos. En el contexto de la computación, donde los recursos se utilizan de manera dinámica y escalable, la política de retención se convierte en un elemento esencial para garantizar que los datos se mantengan el tiempo necesario para su análisis y recuperación, sin incurrir en costos innecesarios por almacenamiento prolongado. Las características principales de una política de retención incluyen la definición de períodos específicos para la retención de datos, la categorización de la información según su importancia y la implementación de procesos automáticos para la eliminación o archivado de datos obsoletos. Esto no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también minimiza riesgos asociados con la gestión de datos, como la exposición a brechas de seguridad o el incumplimiento de regulaciones. En resumen, la política de retención es un componente fundamental en la estrategia de gestión de datos de cualquier organización, asegurando que la información se maneje de manera efectiva y responsable.