Descripción: El patrón de diseño ‘Pool’ se refiere a una estrategia que gestiona un conjunto de objetos reutilizables para optimizar el uso de recursos en sistemas informáticos. Este enfoque es especialmente útil en situaciones donde la creación y destrucción de objetos es costosa en términos de rendimiento. Al mantener un grupo de objetos disponibles para su reutilización, se minimizan los costos asociados con la asignación de memoria y el tiempo de procesamiento. Los pools pueden ser implementados para diferentes tipos de recursos, como conexiones a bases de datos, hilos de ejecución o incluso objetos en memoria. Este patrón no solo mejora la eficiencia del sistema, sino que también contribuye a una mejor gestión de la memoria y a la reducción de la fragmentación. En el contexto de la programación, el uso de pools permite a los desarrolladores manejar de manera más efectiva la carga de trabajo y optimizar el rendimiento de las aplicaciones, especialmente en entornos de alta concurrencia. La implementación de un pool puede variar en complejidad, desde soluciones simples hasta sistemas más sofisticados que incluyen mecanismos de control de acceso y gestión de estado. En resumen, el patrón de diseño ‘Pool’ es una herramienta valiosa en el arsenal de un desarrollador, permitiendo un uso más eficiente de los recursos y mejorando la escalabilidad de las aplicaciones.