Descripción: La proactividad en la ética de la inteligencia artificial (IA) se refiere a la práctica de anticipar y abordar problemas éticos antes de que surjan. Este enfoque implica no solo reaccionar ante situaciones problemáticas, sino también prever posibles dilemas éticos y establecer medidas preventivas. La proactividad es esencial en el desarrollo y la implementación de tecnologías de IA, ya que estas pueden tener un impacto significativo en la sociedad, la privacidad y la equidad. Al adoptar una postura proactiva, los desarrolladores y responsables de políticas pueden identificar riesgos potenciales, como sesgos en los algoritmos, violaciones de la privacidad y la desinformación, y trabajar para mitigarlos desde el inicio del proceso de diseño. Este enfoque también fomenta la transparencia y la responsabilidad, permitiendo que las partes interesadas, incluidos los usuarios y la sociedad en general, participen en la discusión sobre el uso ético de la IA. En resumen, la proactividad en la ética de la IA es un componente crítico para garantizar que las tecnologías emergentes se desarrollen y utilicen de manera que beneficien a la sociedad y minimicen los daños potenciales.