Descripción: Los ‘Problemas No Resueltos’ en el contexto de un pipeline de integración continua se refieren a errores o fallos en el software que aún no han sido identificados o corregidos. Estos problemas pueden surgir en diversas etapas del proceso de desarrollo, desde la codificación hasta la implementación, y pueden afectar la calidad del software, la eficiencia del equipo de desarrollo y la satisfacción del cliente. La identificación y resolución de estos problemas es crucial para mantener un flujo de trabajo ágil y efectivo. En un entorno de integración continua, donde el código se integra y se prueba de manera frecuente, los problemas no resueltos pueden acumularse, generando retrasos y complicaciones en el ciclo de desarrollo. La gestión de estos problemas implica un enfoque proactivo, donde se utilizan herramientas de monitoreo y pruebas automatizadas para detectar fallos antes de que se conviertan en obstáculos significativos. La comunicación efectiva dentro del equipo y la documentación adecuada también son esenciales para abordar estos problemas de manera eficiente y garantizar que se resuelvan en el menor tiempo posible.
