Descripción: La protección de red óptica se refiere a un conjunto de medidas diseñadas específicamente para salvaguardar las redes ópticas contra ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS). Estos ataques buscan saturar los recursos de una red, provocando interrupciones en el servicio y afectando la disponibilidad de la infraestructura. En el contexto de las redes ópticas, que utilizan luz para transmitir datos a través de fibras, la protección DDoS se vuelve crucial debido a la alta capacidad de ancho de banda y la velocidad de transmisión que ofrecen. Las características principales de estas medidas incluyen la detección temprana de patrones de tráfico anómalos, la capacidad de mitigar ataques en tiempo real y la implementación de filtros que pueden identificar y bloquear el tráfico malicioso antes de que alcance su destino. La relevancia de la protección de red óptica radica en la creciente dependencia de las empresas y organizaciones en la conectividad de alta velocidad, donde cualquier interrupción puede resultar en pérdidas significativas. Por lo tanto, contar con soluciones robustas de protección DDoS es esencial para garantizar la continuidad del servicio y la integridad de los datos en entornos ópticos.
