Descripción: Un protocolo de redundancia es un conjunto de reglas y procedimientos diseñados para garantizar que las comunicaciones de red se mantengan operativas incluso en caso de fallos o interrupciones. Este tipo de protocolo se centra en la creación de copias de seguridad de los datos y en la implementación de rutas alternativas para la transmisión de información. Su objetivo principal es aumentar la disponibilidad y la fiabilidad de las redes, minimizando el riesgo de pérdida de datos y asegurando que los servicios permanezcan accesibles. Los protocolos de redundancia son esenciales en entornos críticos donde la continuidad del servicio es primordial, como en la nube, sistemas de telecomunicaciones y redes empresariales. Estos protocolos pueden incluir técnicas como la replicación de datos, el uso de múltiples rutas de comunicación y la implementación de balanceadores de carga que distribuyen el tráfico de manera eficiente. En un mundo cada vez más interconectado, donde la dependencia de la tecnología es alta, la redundancia se convierte en un componente clave para la seguridad y la estabilidad de las infraestructuras de red.