Descripción: Los protocolos de redundancia son mecanismos diseñados para asegurar la disponibilidad y continuidad de los servicios en sistemas informáticos. Estos protocolos funcionan creando copias de seguridad de los recursos críticos, permitiendo que, en caso de que uno de ellos se vea comprometido o inoperativo, otro pueda asumir su función sin interrupciones. Esto es crucial en entornos donde la disponibilidad es esencial, como en servidores web, aplicaciones en la nube y sistemas de comunicación. Los protocolos de redundancia pueden incluir técnicas como la replicación de datos, balanceo de carga y la implementación de servidores de respaldo. Al utilizar estos métodos, las organizaciones pueden mitigar el impacto de un ataque DDoS, que busca saturar los recursos de un sistema para hacerlo inaccesible. En resumen, los protocolos de redundancia son una estrategia fundamental para garantizar la resiliencia y la continuidad operativa frente a amenazas cibernéticas, asegurando que los servicios permanezcan disponibles incluso en situaciones adversas.
