Descripción: Las pruebas de migración son un conjunto de procedimientos diseñados para garantizar que los datos y aplicaciones se transfieran de manera efectiva y precisa de un entorno a otro. Este proceso es crucial en situaciones donde se realizan actualizaciones de sistemas, cambios de infraestructura o migraciones a la nube. Las pruebas de migración se centran en validar la integridad de los datos, la funcionalidad de las aplicaciones y la continuidad del servicio después de la migración. Se llevan a cabo mediante la comparación de los datos originales con los datos migrados, asegurando que no haya pérdidas ni alteraciones. Además, se evalúa el rendimiento del sistema en el nuevo entorno, verificando que todas las funcionalidades operen como se espera. Este tipo de pruebas no solo ayuda a identificar errores y problemas antes de que se complete la migración, sino que también minimiza el riesgo de interrupciones en el servicio y asegura una transición fluida. En un mundo donde las empresas dependen cada vez más de la tecnología y los datos, las pruebas de migración se han convertido en un componente esencial del ciclo de vida del desarrollo de software, garantizando que las organizaciones puedan adaptarse a nuevas tecnologías sin comprometer la calidad o la seguridad de sus datos.
