Descripción: Las Pruebas de Verificación de Redundancia son un conjunto de procedimientos diseñados para asegurar que los sistemas redundantes en una infraestructura tecnológica están funcionando de manera óptima y como se espera. Estas pruebas son cruciales en entornos donde la disponibilidad y la continuidad del servicio son esenciales, como en centros de datos, sistemas de telecomunicaciones y aplicaciones críticas. La redundancia se refiere a la duplicación de componentes o sistemas para aumentar la fiabilidad y minimizar el riesgo de fallos. Las pruebas de verificación se centran en evaluar la capacidad de estos sistemas redundantes para asumir la carga de trabajo en caso de que uno de los componentes falle. Esto incluye la simulación de fallos, la monitorización del rendimiento y la validación de que los sistemas de respaldo se activan correctamente. La implementación de estas pruebas no solo ayuda a identificar debilidades en la infraestructura, sino que también proporciona confianza en la resiliencia del sistema ante posibles interrupciones. En un mundo cada vez más dependiente de la tecnología, la capacidad de un sistema para recuperarse rápidamente de fallos es un factor crítico para el éxito operativo y la satisfacción del cliente.