Descripción: Una Red Ad Hoc Móvil es un tipo de red inalámbrica que se forma espontáneamente y puede cambiar rápidamente. A diferencia de las redes tradicionales, que requieren una infraestructura fija como routers y switches, las redes ad hoc permiten que los dispositivos se conecten entre sí directamente, creando una red temporal y flexible. Estas redes son especialmente útiles en situaciones donde no hay acceso a una infraestructura de red establecida, como en desastres naturales, eventos al aire libre o entornos militares. Las características principales de las redes ad hoc incluyen su capacidad para auto-configurarse, su escalabilidad y su resistencia a fallos, ya que los dispositivos pueden unirse o abandonar la red sin interrumpir su funcionamiento. Además, estas redes pueden operar en diferentes frecuencias y protocolos, lo que les permite adaptarse a diversas condiciones y requisitos de comunicación. La naturaleza dinámica de las redes ad hoc las convierte en una solución ideal para aplicaciones que requieren movilidad y flexibilidad, como la comunicación entre dispositivos móviles y sensores en entornos cambiantes.
Historia: El concepto de redes ad hoc comenzó a desarrollarse en la década de 1970, pero fue en la década de 1990 cuando se formalizó su estudio y aplicación. Uno de los hitos importantes fue el desarrollo de protocolos como AODV (Ad hoc On-Demand Distance Vector) y DSR (Dynamic Source Routing), que facilitaron la comunicación en estas redes. A medida que la tecnología inalámbrica avanzaba, las redes ad hoc comenzaron a ser utilizadas en aplicaciones donde la infraestructura de red no estaba disponible o era impracticable.
Usos: Las redes ad hoc móviles se utilizan en diversas aplicaciones, incluyendo la comunicación en situaciones de emergencia, redes de sensores y en entornos donde la infraestructura de red es limitada o inexistente. También son útiles en eventos temporales, como conferencias o festivales, donde se requiere una red rápida y flexible para la comunicación entre dispositivos.
Ejemplos: Un ejemplo de red ad hoc móvil es la comunicación entre vehículos en un sistema de transporte inteligente, donde los vehículos pueden intercambiar información sobre el tráfico y las condiciones de la carretera. Otro ejemplo es el uso de redes ad hoc en misiones de rescate, donde los equipos de emergencia pueden establecer comunicación entre sí sin depender de una infraestructura de red fija.