Descripción: Una red de redundancia es una infraestructura de red que incorpora conexiones adicionales para asegurar la fiabilidad y disponibilidad de los servicios. Este tipo de red está diseñada para minimizar el riesgo de fallos, garantizando que, en caso de que una conexión o componente falle, haya alternativas disponibles que mantengan la continuidad del servicio. Las redes de redundancia son esenciales en entornos críticos donde la disponibilidad constante es primordial, como en centros de datos, redes empresariales y sistemas de telecomunicaciones. Estas redes pueden incluir múltiples rutas de datos, servidores duplicados y dispositivos de red que trabajan en conjunto para proporcionar un servicio ininterrumpido. La implementación de una red de redundancia mejora la resiliencia, permite una mejor gestión del tráfico y una mayor eficiencia operativa, ya que los recursos pueden ser distribuidos de manera más efectiva. En el contexto de tecnologías emergentes como la computación en la nube y la computación en el borde, las redes de redundancia juegan un papel crucial al asegurar que los datos y servicios estén siempre disponibles, incluso en situaciones de alta demanda o fallos inesperados.
