Descripción: Red Hat OpenShift Virtualization es una solución integral que permite a las organizaciones ejecutar máquinas virtuales (VM) dentro de la plataforma OpenShift, que es un entorno de contenedores basado en Kubernetes. Esta herramienta combina la virtualización tradicional con la modernidad de los contenedores, permitiendo a los usuarios gestionar tanto aplicaciones en contenedores como máquinas virtuales desde una única interfaz. OpenShift Virtualization se basa en KubeVirt, un proyecto de código abierto que extiende Kubernetes para soportar cargas de trabajo de virtualización. Esto significa que las empresas pueden aprovechar la escalabilidad y la flexibilidad de Kubernetes mientras mantienen la capacidad de ejecutar aplicaciones heredadas que requieren máquinas virtuales. Entre sus características principales se incluyen la integración con herramientas de gestión de Kubernetes, la posibilidad de realizar migraciones en vivo de máquinas virtuales y un enfoque en la seguridad y el cumplimiento normativo. Esta solución es especialmente relevante en entornos híbridos y multicloud, donde las organizaciones buscan optimizar sus recursos y simplificar la gestión de sus infraestructuras de TI.
Historia: Red Hat OpenShift Virtualization se basa en KubeVirt, un proyecto que comenzó en 2018 como una forma de integrar la virtualización en Kubernetes. Desde su lanzamiento, KubeVirt ha evolucionado y ha sido adoptado por diversas organizaciones, lo que llevó a Red Hat a integrar esta funcionalidad en su plataforma OpenShift. La primera versión de OpenShift Virtualization fue lanzada en 2019, permitiendo a los usuarios gestionar tanto contenedores como máquinas virtuales en un solo entorno.
Usos: OpenShift Virtualization se utiliza principalmente en entornos donde las organizaciones necesitan ejecutar aplicaciones heredadas junto con aplicaciones modernas en contenedores. Esto es especialmente útil en migraciones a la nube, donde las empresas pueden trasladar sus cargas de trabajo existentes a un entorno más moderno sin necesidad de reescribirlas. También se utiliza para la consolidación de servidores, permitiendo a las empresas optimizar sus recursos de hardware al ejecutar múltiples máquinas virtuales en un solo nodo.
Ejemplos: Un ejemplo práctico de OpenShift Virtualization es una empresa que utiliza esta solución para ejecutar su software de gestión de recursos humanos, que está basado en una máquina virtual, mientras que al mismo tiempo despliega nuevas aplicaciones en contenedores para la gestión de proyectos. Esto les permite mantener su infraestructura existente mientras adoptan nuevas tecnologías.