Descripción: Una red no asegurada es aquella que carece de las medidas de seguridad adecuadas para proteger la información y los dispositivos conectados a ella. Esto significa que no se implementan protocolos de cifrado, autenticación o control de acceso, lo que la hace susceptible a una variedad de ataques cibernéticos. Las características principales de una red no asegurada incluyen la falta de contraseñas robustas, la ausencia de firewalls y la vulnerabilidad a intrusiones externas. Estas redes son especialmente comunes en entornos públicos, como cafeterías, aeropuertos y bibliotecas, donde los usuarios pueden conectarse sin restricciones. La relevancia de identificar y evitar el uso de redes no aseguradas radica en el creciente número de amenazas cibernéticas que pueden comprometer la privacidad y la seguridad de los datos personales. Los atacantes pueden interceptar información sensible, como contraseñas y datos bancarios, a través de técnicas como el ‘sniffing’ o el ‘man-in-the-middle’. Por lo tanto, es crucial que los usuarios sean conscientes de los riesgos asociados con el uso de redes no aseguradas y tomen precauciones, como el uso de redes privadas virtuales (VPN) y la activación de la autenticación de dos factores en sus cuentas.
