Descripción: El riesgo regulatorio se refiere a la posibilidad de que cambios en las leyes y regulaciones afecten las operaciones de un negocio. Este tipo de riesgo puede surgir de diversas fuentes, incluyendo nuevas legislaciones, modificaciones en normativas existentes, o la implementación de políticas gubernamentales que impacten el entorno operativo de una organización. En el contexto de la tecnología y la ciberseguridad, el riesgo regulatorio es especialmente relevante, ya que las empresas deben cumplir con normativas que protegen datos sensibles y garantizan la privacidad de los usuarios. La falta de cumplimiento puede resultar en sanciones financieras, daños a la reputación y pérdida de confianza por parte de los clientes. Por lo tanto, las organizaciones deben estar atentas a los cambios regulatorios y adaptar sus estrategias de seguridad y operaciones para mitigar este riesgo. La gestión efectiva del riesgo regulatorio implica la identificación, evaluación y priorización de los cambios normativos, así como la implementación de controles adecuados para asegurar el cumplimiento y la resiliencia organizacional.