**Descripción:** Los robots de asistencia son dispositivos robóticos diseñados específicamente para ayudar a personas con discapacidades o ancianos en su vida diaria. Estos robots pueden realizar una variedad de tareas que facilitan la independencia y mejoran la calidad de vida de sus usuarios. Su diseño se centra en la interacción humana, la accesibilidad y la funcionalidad, permitiendo que las personas que enfrentan limitaciones físicas o cognitivas puedan llevar a cabo actividades cotidianas con mayor facilidad. Los robots de asistencia pueden incluir características como la navegación autónoma, la capacidad de reconocer y responder a comandos de voz, y la integración con dispositivos inteligentes del hogar. Además, suelen estar equipados con sensores que les permiten adaptarse a su entorno y a las necesidades específicas de cada usuario. La relevancia de estos robots radica en su potencial para reducir la carga sobre los cuidadores humanos y proporcionar un apoyo emocional y físico a quienes lo necesitan, promoviendo así una vida más autónoma y digna.
**Historia:** Los robots de asistencia tienen sus raíces en la robótica de los años 60 y 70, cuando se comenzaron a desarrollar los primeros robots industriales. Sin embargo, su evolución hacia dispositivos diseñados para ayudar a personas con discapacidades comenzó en la década de 1980, con el avance de la tecnología de sensores y la inteligencia artificial. En 1996, el robot ‘Aibo’ de Sony, aunque no era un robot de asistencia en el sentido estricto, marcó un hito en la interacción humano-robot. A partir de los años 2000, la investigación y el desarrollo de robots de asistencia se aceleraron, impulsados por el envejecimiento de la población y la creciente demanda de soluciones que mejoren la calidad de vida de las personas mayores y con discapacidades.
**Usos:** Los robots de asistencia se utilizan en una variedad de contextos, incluyendo el hogar, hospitales y centros de atención. Su principal función es ayudar a las personas con movilidad reducida a realizar tareas diarias como levantarse de la cama, moverse por la casa, preparar comidas o recordarles tomar medicamentos. También pueden ofrecer compañía y apoyo emocional, lo que es especialmente valioso para personas mayores que pueden experimentar soledad. Además, algunos robots están diseñados para facilitar la rehabilitación física, proporcionando ejercicios guiados y monitoreo del progreso.
**Ejemplos:** Ejemplos de robots de asistencia incluyen ‘Paro’, un robot terapéutico en forma de foca que ayuda a reducir la ansiedad en pacientes mayores, y ‘Robear’, un robot diseñado para ayudar a levantar y mover a personas con movilidad reducida. Otro ejemplo es ‘ElliQ’, un robot social que interactúa con personas mayores, recordándoles actividades y facilitando la comunicación con familiares. Estos robots demuestran cómo la tecnología puede integrarse en la vida diaria para mejorar la autonomía y el bienestar de sus usuarios.