Descripción: La segmentación de grupo es una estrategia de seguridad que implica dividir una red en segmentos más pequeños y manejables para mejorar tanto la seguridad como el rendimiento. Esta práctica permite aislar diferentes partes de la red, lo que significa que si un segmento es comprometido, el daño potencial se limita a esa área específica, protegiendo el resto de la infraestructura. Además, la segmentación puede optimizar el rendimiento al reducir la congestión del tráfico, ya que cada segmento puede ser configurado para manejar diferentes tipos de datos y aplicaciones. En entornos de confianza cero, donde se asume que las amenazas pueden provenir de cualquier parte, la segmentación se convierte en una herramienta esencial. Cada segmento puede tener políticas de acceso y controles de seguridad específicos, lo que permite una gestión más granular de los permisos y la monitorización del tráfico. Esto no solo mejora la seguridad, sino que también facilita el cumplimiento de normativas y estándares de protección de datos, ya que se pueden aplicar medidas específicas en función de la sensibilidad de la información que maneja cada segmento. En resumen, la segmentación de grupo es una práctica clave en la arquitectura de redes modernas, especialmente en entornos donde la seguridad es una prioridad crítica.
