Descripción: La seguridad adaptativa es un enfoque de seguridad que se ajusta al cambiante panorama de amenazas. Este concepto implica la capacidad de un sistema para modificar sus medidas de seguridad en tiempo real, en respuesta a nuevas vulnerabilidades y ataques emergentes. A diferencia de los enfoques de seguridad tradicionales, que a menudo son estáticos y se basan en reglas predefinidas, la seguridad adaptativa utiliza tecnologías avanzadas como inteligencia artificial y aprendizaje automático para analizar patrones de comportamiento y detectar anomalías. Esto permite a las organizaciones no solo reaccionar ante incidentes de seguridad, sino también anticiparse a ellos, mejorando así su postura de seguridad general. La seguridad adaptativa es especialmente relevante en entornos complejos y dinámicos, como la computación en la nube, el Internet de las Cosas (IoT) y las redes 5G, donde las amenazas pueden evolucionar rápidamente y los activos pueden estar distribuidos en múltiples ubicaciones. Este enfoque también se alinea con los principios de Zero Trust, que promueven la verificación continua de usuarios y dispositivos, independientemente de su ubicación dentro o fuera de la red. En resumen, la seguridad adaptativa representa una evolución necesaria en la defensa cibernética, permitiendo a las organizaciones mantenerse un paso adelante de los atacantes en un mundo digital en constante cambio.