Descripción: La seguridad de extremo a extremo es un enfoque de seguridad integral que protege los datos desde el punto de origen hasta el punto de consumo. Este concepto se vuelve crucial debido a la naturaleza altamente interconectada y la gran cantidad de dispositivos que se conectan a las redes modernas. La seguridad de extremo a extremo implica la implementación de medidas de protección en cada etapa del ciclo de vida de los datos, asegurando que la información permanezca confidencial, íntegra y disponible. Esto se logra mediante el uso de cifrado, autenticación y controles de acceso, que garantizan que solo los usuarios autorizados puedan acceder a los datos y que estos no sean alterados durante su transmisión. Además, la seguridad de extremo a extremo ayuda a mitigar riesgos asociados con ataques cibernéticos, como el espionaje y la manipulación de datos, que son cada vez más comunes en un entorno digital. Este enfoque no solo se aplica a la transmisión de datos, sino también a la infraestructura de red, donde se implementan protocolos de seguridad para proteger los dispositivos y las conexiones. En resumen, la seguridad de extremo a extremo es fundamental para garantizar la confianza y la seguridad en un mundo donde la conectividad y el intercambio de datos son omnipresentes.
