Descripción: La Seguridad de Línea Base se refiere a los requisitos mínimos de seguridad que deben cumplirse para proteger los sistemas de información. En el contexto de Zero Trust, esta práctica implica establecer un conjunto de controles y configuraciones de seguridad que aseguran que todos los sistemas, aplicaciones y datos estén protegidos de manera uniforme. La idea central es que, independientemente de la ubicación del usuario o del dispositivo, se debe aplicar un enfoque riguroso de seguridad. Esto incluye la autenticación multifactor, la segmentación de redes y la monitorización continua de actividades. La Seguridad de Línea Base no solo se enfoca en la protección de la infraestructura, sino que también considera la gestión de identidades y accesos, asegurando que solo los usuarios autorizados tengan acceso a recursos críticos. Además, se actualiza regularmente para adaptarse a nuevas amenazas y vulnerabilidades, garantizando que las medidas de seguridad sean efectivas y pertinentes. En un entorno dinámico, donde los recursos pueden ser accedidos desde múltiples ubicaciones, establecer una línea base de seguridad sólida es esencial para mitigar riesgos y proteger la integridad de los datos y sistemas.
