Descripción: La seguridad holística implica un enfoque integral para proteger sistemas, considerando todas las vulnerabilidades potenciales. Este concepto se basa en la idea de que la seguridad no debe ser vista como un conjunto de medidas aisladas, sino como un sistema interconectado donde cada componente juega un papel crucial en la protección general. En el contexto de tecnologías emergentes, la seguridad holística se vuelve aún más relevante, ya que los dispositivos operan en entornos distribuidos y a menudo menos controlados. Esto significa que deben ser protegidos no solo a nivel de software, sino también en términos de hardware, redes y datos. La seguridad holística abarca la identificación de amenazas, la implementación de controles de acceso, la encriptación de datos y la monitorización continua de actividades sospechosas. Además, fomenta la colaboración entre diferentes disciplinas y equipos dentro de una organización para asegurar que todos los aspectos de la seguridad estén alineados y sean efectivos. Este enfoque también considera la formación y concienciación del personal como un componente esencial, dado que muchos incidentes de seguridad son el resultado de errores humanos. En resumen, la seguridad holística busca crear un entorno seguro y resiliente, donde cada elemento contribuya a la protección de los activos y la información crítica.