Descripción: La Señal Modulada por Ancho de Pulso (PWM, por sus siglas en inglés) es una técnica de modulación que se utiliza para codificar información mediante la variación del ancho de los pulsos en una señal digital. En lugar de cambiar la amplitud de la señal, como en la modulación de amplitud (AM), o la frecuencia, como en la modulación de frecuencia (FM), la PWM ajusta el tiempo durante el cual la señal está en estado alto (encendida) en comparación con el tiempo que está en estado bajo (apagada). Esta variación en el ancho de los pulsos permite representar diferentes niveles de voltaje o intensidad, lo que es especialmente útil en aplicaciones de control de potencia y señalización. La PWM es ampliamente utilizada en sistemas de control de motores, iluminación LED y en la generación de sonidos, entre otros. Su simplicidad y eficiencia la convierten en una herramienta valiosa en el ámbito de la electrónica y la programación, especialmente en plataformas de desarrollo general, donde se puede implementar fácilmente para controlar dispositivos de manera precisa y efectiva.
Historia: La técnica de modulación por ancho de pulso se desarrolló en la década de 1960, inicialmente en el contexto de la electrónica de potencia y el control de motores. A medida que la tecnología avanzaba, se hizo evidente su utilidad en diversas aplicaciones, desde la regulación de voltaje hasta la transmisión de datos. Con el auge de la microelectrónica y los microcontroladores en los años 80 y 90, la PWM se popularizó aún más, convirtiéndose en un estándar en el diseño de circuitos electrónicos. La llegada de plataformas de desarrollo facilitó su implementación, permitiendo a los entusiastas y profesionales experimentar con esta técnica de manera accesible.
Usos: La Señal Modulada por Ancho de Pulso se utiliza en una variedad de aplicaciones, incluyendo el control de motores eléctricos, donde permite ajustar la velocidad y el par motor de manera eficiente. También se emplea en la regulación de la intensidad de luces LED, permitiendo crear efectos de atenuación y parpadeo. En sistemas de audio, la PWM se utiliza para generar tonos y sonidos, y en la transmisión de datos, puede servir para codificar información de manera efectiva. Además, es común en fuentes de alimentación conmutadas, donde se utiliza para controlar la entrega de energía.
Ejemplos: Un ejemplo práctico de PWM es el control de un motor de corriente continua utilizando un microcontrolador. Al variar el ciclo de trabajo de la señal PWM enviada al motor, se puede controlar su velocidad de manera precisa. Otro ejemplo es el uso de PWM para atenuar la luz de un LED; al ajustar el ancho de los pulsos, se puede lograr que el LED brille con diferentes intensidades. Además, en aplicaciones de audio, la generación de tonos mediante PWM permite crear sonidos en dispositivos como altavoces o buzzer.